Es una costumbre confundir importancia con urgencia y en la sociedad de la inmediatez, sin duda uno ha de aprender a gestionar su tiempo con eficacia y aprender a organizarse con el objetivo de no caer en ese estrés tan temido.
Esa urgencia nos mata con las redes sociales, el teléfono, el correo electrónico, y porqué no con ese jefe “cabrón” que te dice que todo es para ya. Y es que en nuestro a salto de mata diario, nos dirigimos a lo urgente sin perder el tiempo y sin saber dónde está el norte…y nos olvidamos en el mientras, de lo importante que está pasando en ese momento, desde ver un paisaje a mantener una conversación con un amigo o … simplemente si tu hijo te está diciendo que está contento porque ha metido 2 goles y lo quiere compartir contigo y tú en ese trabajo “urgente” que tienes, no sabes parar y pensar que eso para él y para ti (por cierto) debería ser importante… ¡Y es que incluso si tienes ganas de mear, lo grave en muchos casos es que lo dejas para después y lo siento…si tu uretra te manda, hazle caso, en ese momento mear es importante …y encima urgente!.
Ay, en el fondo uno debería ser sincero consigo mismo cuando dice aquello de “en mi vida lo más importante son mi familia, los amigos…etc”. Decía William James que “ser sabio es el arte de saber qué pasar por alto”. Bon dia tingueu!!!
P. D. ¿Hacemos una cerveza?
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