Cristiano y la búsqueda de la felicidad

Cristiano Ronaldo dice que está triste. Lo dijo hace algunas semanas, y a partir de ese momento se ha escuchado de todo sobre el tema. Lo más recurrente ha sido aquello de, con lo que gana como es posible que esté triste. Creo que todos conocemos a personas que ganan mucho dinero y no por ello consiguen realizarse. Desde mi experiencia como formador y coach, no es la primera vez que me he encontrado con casos parecidos.

Analicemos las posibles causas que han originado la tristeza de Ronaldo, y sus posibles soluciones.

Una primera opción, podría ser como han comentado, el querer ganar más dinero. Sinceramente, no creo que sea por el simplemente hecho de querer ser más rico. Otra cosa bien distinta, es que tenga alguna emoción tóxica (Bernardo Stamateas) hacia otros jugadores que ganan más. En este caso, creo que la emoción, sin la toxicidad de por medio, la puedo entender. Cristiano Ronaldo aporta mucho más rendimiento a su equipo que otros jugadores que sí ganan más. Sin duda, es uno de los mejores jugadores del mundo, y si  su objetivo es ese,  ganar más dinero, la felicidad depende de él mismo. Y va por el buen camino, ya que no dudo que si sigue jugando como juega se le aumentará el sueldo. Otra cosa será cuánto le durará esa motivación, ya que está comprobado como dicen muchas teorías de motivación que un aumento de sueldo, a partir de unos «mínimos» te motivan unos días y después volvemos a las andadas, o a la «tristeza».

Otro motivo que han aludido en prensa sobre la tristeza de Cristiano, es la ausencia de reconocimientohacia su persona. Hace unas semanas, entregaron el «balón de oro» al mejor jugador de Europa, y se lo dieron a Andrés Iniesta. No es el primer trofeo que no gana en los últimos años. Dicen que en su equipo no le reconocen el trabajo que hace. Creo que sí se lo reconocen, pero en una persona a parte del hacer y el tener, está el ser. (En esta sociedad no nos preocupamos mucho por quienes somos y sí mucho sobre lo que hacemos y tenemos). Ahí es donde el aficionado pierde la afinidad con Cristiano Ronaldo. Por poner algún ejemplo diría que a parte de diferentes comentarios que hace, en mi opinión no muy acertados, su comunicación no verbal no le acompaña a la hora de celebrar los goles (señalándose a él mismo…) y tampoco en diferentes entrevistas que le hacen, etc.

Este punto, el del reconocimiento va muy ligado al tercer motivo que se ha comentado en diferentes foros por el que el portugués puede estar triste, y es el de querer ser líder en su equipo.

Una cosa es servir al equipo y otra muy distinta es servirse del equipo para conseguir sus logros personales. Los grandes líderes hacen lo primero. Son un ejemplo a seguir en su equipo y de cara a los aficionados, tienen una personalidad agradable, asumen responsabilidades aunque no sean de su agrado (¡intentar tirar el último penalty con su selección en el Europeo!), son humildes, no son egoistas, no tienen temor a la competencia. Diría más características que definen a un líder, pero estas creo que son suficientes.

La felicidad de Cristiano Ronaldo depende de él. Tenemos una gran facilidad para culpabilizar a los demás de nuestra no felicidad. Cristiano tiene todos los recursos para encontrar la felicidad. En el caso del reconocimiento y el liderazgo, siempre le quedará la posibilidad de modelar a aquellos jugadores que sí cumplen con el perfil, y que por cierto existen algunos en diferentes equipos de la liga y para no irse tan lejos en su propio equipo también.

Es cuestión de actitud. No es fácil pero todo es empezar.